Podemos echar un vistazo a estas dos interesantes muestras arquitectónicas situadas en un entorno rural centrado en la producción vinícola.
Las Bodegas Ysios están situadas en la zona de Laguardia, con la Sierra de Cantábria de fondo. El edificio que las alberga ha sido diseñado por Santiago Calatrava.
La obra se basa en dos muros portantes de hormigón armado con una separación de 26 metros entre ellos. Dichos muros están revestidos por lamas verticales de madera cuperizada (madera tratada con sales de cobre). Estos muros trazan una linea sinusoide, actuando como cerramiento.
La cubierta está formada por vigas de madera que apoyan sobre los muros laterales, describiendo así una superficie ondulada. El material empleado en su acabado exterior es aluminio, que contrasta con la madera de los muros. El interior de la bodega acompaña la concepción vanguardista del exterior.
Las Bodegas Marqués de Riscal son obra del arquitecto Frank O. Gehry. El diseño lleva todos los ingredientes típicos de Gehry, es decir, no faltan ni el titanio ni las formas caprichosas.
La mejor representación del espíritu innovador de Marqués de Riscal y su mundo de sensaciones es, sin duda, el edificio diseñado por Frank O. Gehry, una obra, que aunque llena de formas, está
en perfecta sintonía con el paisaje de la zona.
Al igual que el Museo Guggenheim, el edificio diseñado por Gehry está recubierto de titanio, aunque en este caso, el arquitecto ha querido impregnar su obra de los colores de Marqués de Riscal: rosa, como el vino tino, oro, como la malla de las botellas de Riscal, y plata, como la cápsula de la botella.
¿Cómo se llegó a Gehry y cómo aceptó el proyecto?
Herederos del Marqués de Riscal tenía claro que quería realizar un edificio vanguardista que despertara emociones. Para conseguirlo pensó en Frank O. Gehry, un arquitecto de prestigio mundial conocido por obras como el Museo Guggenheim de Bilbao. Cuando se planteó el proyecto, el equipo de Marqués de Riscal no tenía claro que Gehry aceptara. Pero se le presentó la propuesta, acompañada de un vino del año de su nacimiento (1929), y aceptó con gran entusiasmo, además, él nunca había diseñado una bodega, para él suponía un nuevo reto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario